UNA ODISEA COREOGRÁFICA
Llega mañana 22 de noviembre al Museo de la Universidad de Navarra Lava, la compañía del Auditorio de Tenerife que dirige Daniel Abreu con un programa doble firmado por Fernando Hernando y La intrusa
Texto_OMAR KHAN Foto_MARCOSGPUNTO
Madrid, 21 de noviembre de 2019
En ebullición arrancó Lava. Después de su presentación oficial en Tenerife, la recién nacida compañía del Auditorio de Tenerife dirigida por Daniel Abreu enfrentó su primer reto importante en Donostia, bajo el marco relevante de dFeria y llega ahora al Museo de la Universidad de Navarra, en Pamplona, este viernes 22 de noviembre. Se trata de un programa doble, tremendamente contrastado, que pone de manifiesto el rasgo ecléctico y diversificado que Abreu quiere imprimir a este colectivo tinerfeño que funciona por encargos. Su entregado equipo de bailarines demuestra en esta primera incursión capacidades, físicas y emocionales, en sintonía con esta filosofía, defendiendo la belleza y exigencias formales de Bending The Walls, de, coreógrafo español Fernando Hernando Magadán, recién nombrado director del NDT2 holandés, y la agonía vivencial de una misión fracasada en la muy sideral Beyond (en la foto), que les montó Damián Muñoz & Virginia García, de La Intrusa Danza, de Barcelona, quienes se atreven con una creación que es toda una odisea del espacio.
Las referencias de Beyond hay que ubicarlas de manera muy específica en el cine serie B de ciencia ficción de los 70 y 80’s. Un ordenador inteligente color naranja vintage y pariente seguro del HAL 9000, del Stanley Kubrick de 2001, odisea del espacio, parece dirigir desde arriba toda la coreografía. Escanea los cuerpos, los sigue con su luz amenazadora, los escruta con su ojo orweliano de Gran Hermano. Sin excesos dramáticos, la danza transmite la sensación de asilamiento y locura que reina en la tripulación danzante de esta nave que avanza a ciegas por el espacio. Hay muchos detalles reveladores de un conocimiento, una afición, un fanatismo quizá, por ese cine de otro tiempo, que hace totalmente entrañable la propuesta. La Intrusa aborda los temas filosóficos clásicos y todos los tics del género sin pretensión de ser película. Allí el mérito. Es danza de ciencia ficción, una coreografía de estética retro que se construye a partir de referencias cinéfilas muy reconocibles. De bellísima factura, consigue el gran final épico, típico y trágico, de estas sagas estelares.
En las antípodas, Bending The Walls, trae a los cuerpos de Lava la rigurosa y perfectamente identificable estética del NDT, la relevante compañía holandesa. Fernando Hernando construye, desde la belleza en términos absolutos, una coreografía delicada y emocionante, en la que los bailarines parecen esforzarse por levantar una pared. Poblada de ladrillos, la pieza parece balancearse sin decantarse por las múltiples connotaciones que un ladrillo tiene. La construcción de una casa, la edificación de un sueño o algo que aspira a serlo, labrarse un camino, buscar estabilidad. En medio de la placidez aparente, el coreógrafo introduce rupturas bruscas, que ponen el escenario en emergencia con pulsaciones sonoras como martillazos que avanzan decididas hacia un tronar escénico, en una pieza sobre todo elegante que sabe medir muy bien su crescendo.
El doble programa juega al contraste y habla de la línea ecléctica que Abreu, quien tendrá un encuentro con el público a las 12m del mismo día en el Museo, quiere imprimir al colectivo de Canarias, que se prepara ahora a estrenar un nuevo programa doble el 1 de diciembre en el Auditorio de Tenerife, conformado por las creaciones Hush, del coreógrafo israelí Roy Assaf y Yalacha, que les ha montado el creador coreano Dong Kyu Kim.
La presentación de Lava en Pamplona se enmarca dentro del ciclo Museo en Danza, que adelanta el Museo de la Universidad de Navarra, que prosigue con la presentación de la muy sugerente Las alegrías, solo de la creadora también canaria Paula Quintana este sábado 23, la performace No half measures de la compañía valenciana Taiat Dansa el miércoles 27 y Trasunto#2 de María Siebald el día 28.
