DESAFIANDO LA GRAVEDAD
DESAFIANDO LA GRAVEDAD Yoann Bourgeois regresa a Madrid para ocupar el patio de Condeduque del 2 al 4 de junio con una insólita instalación acrobática que vuelve sobre el punto de suspensión, su tema inagotable. Nos lo ha contado…
Texto_BEGOÑA DONAT Fotos_PASCALE CHOLETTE
Madrid, 30 de mayo de 2022
Una de las obsesiones de Yoann Bourgeois es la gravedad. En concreto, ese momento congelado, furtivo, en el que un objeto lanzado al aire alcanza el punto álgido de la parábola justo antes de precipitarse al vacío. La fuerza por la que la Tierra atrae cuerpos hacia su centro ya fue abordada por el creador francés en su debut, Cavale, y fue el meollo de la propuesta más exitosa de su carrera, Ce lui qui tombe. Del 2 al 4 de junio, el Patio Central del Centro Cultural Condeduque de Madrid acoge ahora, con las entradas completamente agotadas, Tentative approaches to a point of suspension, su último, que no definitivo, tanteo coreográfico y circense de la caída a 9,8 metros por segundo.
Si Ce lui qui tombe era una metáfora de la solidaridad ¿de qué lo es Tentative approaches to a point of suspension?
Tentative approaches to a point of suspension es el nombre de esta investigación procedimental que vengo realizando desde hace poco más de diez años. Produzco dispositivos que amplifican fenómenos físicos: la gravedad, la fuerza centrífuga, la inercia, el equilibrio... Busco poner en juego la elocuencia de estos fenómenos. Como consecuencia, cada dispositivo genera diferentes potenciales metafóricos.
En esta pieza vuelve a abordar ese momento mágico que los malabaristas denominan punto de suspensión. ¿Es su exploración definitiva o piensa que es un tema inagotable?
Es un tema inagotable. De hecho, más que de un tema, hablaría de una búsqueda existencial. La noción de suspensión es polisémica, existe en múltiples dimensiones. Además, nunca se alcanza definitivamente, sino que se ve como una búsqueda infinita porque presupone el movimiento.
Ha practicado la acrobacia y los malabarismos, pero también ha trabajado como bailarín para coreógrafos conceptuales como Maguy Marin. ¿Se considera más un artista de circo o de danza?
Soy un artista. Y como cualquier artista exploro las márgenes. Estas categorías por disciplinas no tienen un significado profundo para mí, lo que me interesa es el vértigo que recorre las artes.
¿Qué disciplinas demanda a los artistas de esta propuesta?
Una práctica del juego, en particular del simulacro y el vértigo.
¿Cuánto necesita de la ciencia para el desarrollo de sus proyectos?
Necesito de la ingeniería mecánica, la biomecánica y la física.
Como para Leonardo da Vinci, las máquinas son sus aliadas. ¿Qué inventores han sido una inspiración?
Galileo, Foucault, Schrodinger…
Sobre el papel, Tentative approaches to a point of suspension, recuerda a la película de Christopher Nolan Tenet (2020). ¿Bebe de la literatura y del cine de ciencia ficción?
No son inspiraciones conscientes, aunque soy un gran lector y apasionado del cine. Mis fuentes de inspiración provienen más de las artes visuales: Maurits Cornelis Escher por sus juegos de perspectiva, Bas Jan Ader por sus juegos consigo mismo, Roman Opalka por su juego con el infinito, o Francis Bacon, que jugaba a pintar fuerzas.
Todos sus proyectos son site specific, lo que implica una imbricación de los dispositivos con el entorno. ¿Cómo dialogará esta obra con el Centro Condeduque de Madrid?
Hemos observado la geometría y la escala de la plaza pavimentada de Condeduque para buscar los mejores dispositivos dentro de nuestro repertorio y su buena disposición en el espacio. Hemos jugado con un efecto de simetría.
Ha afirmado que el vestuario es muy relevante para explorar la relación de los artistas con el fenómeno físico. ¿Cuáles son las características del vestuario en este proyecto?
Como buscamos aumentar el halo imaginario de cada fenómeno, trabajamos sobre un registro de indumentaria bastante universal. Esto también incentiva a cada espectador a poder proyectarse más fácilmente en el cuerpo que percibe.
Ha declarado en una entrevista reciente que hay personas cuyo trabajo se vuelve más complejo a medida que evolucionan sus carreras, pero que en su caso sucede lo opuesto. ¿Cómo es así?
Mi enfoque es simplificar. Mi trabajo es eliminar gradualmente todo lo que no es necesario, hasta el punto en que ya no se puede eliminar nada más porque se corre el riesgo de derrumbar el edificio. Es en este punto final de equilibrio muy precario donde la búsqueda tiene más poder.
Dados los acontecimientos políticos, medioambientales, sanitarios y sociales recientes, ¿cuánto desearía poner el mundo en suspenso?
Este es, quizás, el propósito de esta búsqueda infinita: frustrar las relaciones de poder que se ejercen diariamente en esta tierra. Y a ese respecto, creo que la poesía es absolutamente necesaria.
MÁQUINAS DE SUPENSIÓN
Texto_ALBA ANZOLA
La idea original en su cabeza suponía un imposible. Yoann Bourgeois lo que quería era hacer un espectáculo que le permitiera desactivar el tiempo. La idea le vino cuando reflexionó sobre cómo en nuestros días podemos anticiparnos a muchas de las cosas que nos van a ocurrir y hablar de ellas “con ese aire de pasado”. Así que un poco más realista pero no menos imaginativo se fijó entonces en el punto de suspensión y a este tema, según dice inagotable, ha dedicado su corta pero meteórica carrera que le ha llevado hasta la dirección (compartida con Rachid Ouramdane) del Centro Coreográfico Nacional de Grenoble, siendo el primer artista procedente del circo que ocupa, desde 2016, uno de los muy codiciados centros oficiales de creación coreográfica de Francia.
Su insólito trabajo aparece sustentado en enormes aparatos de circo, unas máquinas inventadas para crear suspensión, que son capaces de disparar los cuerpos por el aire únicamente para deleitarse en ese segundo de inmovilidad que se produce cuando la fuerza de gravedad atrae el objeto lanzado nuevamente hacia tierra. No es solamente espectáculo. Hay filosofía, reflexión metafísica, inquietud por el funcionamiento del universo. Cierto, que para los niños hay diversión y asombro, pero para los adultos hay una lectura más profunda, una invitación a la reflexión. El punto culminante de esta curiosa investigación está en Ce lui qui tombe, una propuesta verdaderamente sorprendente que no ha parado de girar, siempre con éxito. El resto de su producción ha sido una consecuencia, una parte de un todo aún inacabado que sigue desarrollándose.
Cuando el Centro de Monumentos Nacionales de Francia, le pidió a Bourgeois crear un espectáculo diseñado a medida para uno de sus espectaculares edificios no dudó en escoger el Panteón de París y quiso centrarse en las ideas sugeridas en El péndulo de Focault. Sus máquinas en aquel contexto magnificaron el efecto y de esa propuesta surgió Tentative approaches to a point of suspension, que ahora busca acomodo en los Patios de Condeduque, en el que promete ser un magnífico cierre de temporada para esa casa dirigida con acierto por Natalia Álvarez Simó.
